Iniciaremos con los siguientes interrogantes:
¿porqué nos atrae la música? ¿porqué la buscamos en diferentes momentos de nuestras actividades cotidianas? o ¿Como sería la vida sin música? En realidad no necesitamos ser musicólogos expertos para responder a éstas preguntas. La respuesta es que llegamos a la música porque nos .gusta.
Y nos gusta porque nos produce diferentes sensaciones, las cuales son muy distintas en cada persona, es decir, lo que le gusta a unos no necesariamente le gusta a otros.
Y ¿porque se producen éstas sensaciones cuando nos acercamos a la música? la respuesta a ésta pregunta se la debemos a la presencia de los elementos que ella contiene, los cuales a su vez, nos llevan a desentrañar el complejo proceso de percepción musical que se desata en nuestro cerebro, el cual no es objeto de ésta lección.
Nos limitaremos a hablar de los elementos de la música. Ellos son:
- El ritmo
- la melodía
- el timbre
- la armonía
Para comprender mejor éstos conceptos, vamos a comparar el discurso musical con la elaboración de un bello tejido.
El Ritmo es la sucesión de golpes y acentos ordenados en el tiempo y codificados de alguna manera (aunque aveces no comprendamos esa codificación) la cual alberga en si misma a los otros elementos de la música. Es decir, es como si fuera la puntada con la cual elaboramos el tejido. es el responsable de “atrapar” físicamente al sonido.
La melodía es la sucesión de diferentes alturas, contenidas dentro del ritmo. éstas alturas también están codificadas y pueden pertenecer a diferentes sistemas como el tonal, el modal o el atonal. Es como los diferentes colores que tendrá nuestro tejido.
El timbre Es la característica sonora individual y específica que posee el objeto que está produciendo el sonido. Es lo que hace que un piano suene como piano y un violín como violín. Aunque los dos interpretaran la misma melodía, a la misma velocidad, ésta producirá sensaciones muy diferentes en cada persona, debido al particular sonido de cada uno de éstos instrumentos. En nuestro tejido sería como el material de los hilos que estamos tejiendo, por ejemplo, el algodón es muy diferente a la lana virgen.
La armonía es la simultaneidad de los sonidos, éste elemento es en ocasiones complejo de percibir. Porque aunque sólo se produzca una sola melodía, o un sólo discurso rítmico, siempre habrá armónicos inaudibles para el oído humano que acompañan el sonido. Es mas fácil percibir la armonía cuando tenemos toda una orquesta! y aquí está la labor del gran compositor…… manejar la armonía… para que su tejido sea una obra de arte. y siguiendo con nuestro ejemplo, es cuando tomamos distancia y vemos el tejido completo con todas sus formas, colores y texturas.
Estos conceptos te ayudarán a disfrutar mejor la música. La próxima vez que escuches tu pieza musical favorita, intenta identificar éstos elementos.
Hasta pronto, nos veremos en otra lección de “aprende música con nosotros”